“Hay muchos misterios por los que quisiera preguntar, especialmente el de mi patio, que hoy no me deja descansar. Hay perros, gatos e incluso conejos conviviendo en un solo lugar, donde existe un mundo mágico del cual quisiera participar.
Mi casa se encuentra a los pies de una montaña emblemática de Bogotá, donde la luna nos arropa y el viento nos silba sin parar. Cada noche es un misterio, un problema sin resolver, pasan cosas interesantes y no hay un testigo para esclarecer.
Un ladrido sin parar, un aullido sin descansar, cuatro ojos enigmáticos junto a muchas plantas, conforman nuestro hogar. Al otro día en medio de la tranquilidad, con mi hermana y mi mamá el patio hay que limpiar, y solo nos queda esperar lo que la noche nos quiera contar”.
Lizeth Martínez Triana
Artista: Omar Castañeda, Mesa Local de Antonio Nariño