“Ciertamente lo ocurrido fue en la casa, en la cual hay una alberca en la terraza, o como un gran nido, donde se reúnen muy seguido seres primitivos o algunas aves mitológicas cuando se han herido.
Dentro de una habitación de ciento ochenta centímetros al cuadrado, se han encontrado con el destino, frente a una repisa con los siete libros prohibidos, de los siete poetas más temidos. Se habían encerrado nuevamente en su interior, en la habitación, el universo encontraron, ¡pero en realidad fue el pensamiento quien los concibió a ellos!
Presentando el ‘todo’ en un concepto o dos; al otro lado de la realidad y en primer lugar, sus cabezas. Diminuta pieza del vasto engranaje, infinita alcoba interminable, símbolo ancestral fueron el umbral y su corazón el motor inmóvil. Ahora no saben en dónde se encuentra el mañana, el ayer o el hoy”.
Sergio Garnica Salazar
Artista: Johan Abril, Mesa Local de Fontibón